Quiero escribir, para ello, lo único que tengo que hacer es escribir. Quiero viajar, pero todo lo que tengo son excusas para no hacerlo. No he escrito nada en mucho tiempo por el miedo a hacerlo mal. La única manera de disipar ese temor es enfrentándome a él. Mirarle directamente a la cara y no pensar en evaluarlo todo. Me da igual que salga mal, ya saldrá bien en otro momento.
Quiero imaginar nuevos mundos, personas que merezca la pena conocer. Describirlo todo tan bien no es fácil, pero me esforzaré para que sea así. Porque para mí la escritura siempre ha sido algo improvisado y lo que la escritura es, sólo se parece un poco a esa improvisación. Se parece un poco a esa improvisación por el hecho de darle vuelo a tu imaginación. Claro que se puede hacer a lo loco, pero también hay que tener momentos de querer hacer una buena estructura y emplear un léxico correcto.Me faltan la experiencia y las sabidurías para poder hacer de lo que escribo, arte.
Hay que empezar un año nuevo, pero sin perder la esencia. El tópico de "año nuevo, vida nueva" no es válido para mí, si eso se cumpliese, nadie sería como es. Pero siempre puedes ponerte proposiciones de año nuevo que no llevan a nada. Yo me he impuesto una proposición de vida entera, que tras mucho meditar, parece que ha dado resultado y me ha dado fuerzas para seguir escribiendo.
No dejaré de escribir sobre mi vida, porque es lo más fácil para poder practicar. Espero algún día, convertirme en arte.
