Cuando esta columna se
realizó, hace ya casi 4 años, el mundo entero esperaba con gran ilusión ese
cambio que traería la presidencia de Obama. Ahora, echo la vista atrás y me
pregunto, ¿qué ha hecho Obama en todo este tiempo? Ordenar el retiro de las
tropas de Irak, el traslado de los presos de Guantánamo y hasta aquí puedo
recordar. Así que o yo no me acuerdo o no ha hecho nada de gran calibre que yo
hubiera visto en las noticias.
Y si siguiéramos la idea de
que el voto joven hubiese cambiado la política, puede que Jose María Carrascal estuviera
equivocado ya que los políticos no han escuchado a los jóvenes. Por eso, se
llevó a cabo el movimiento 15-M. Los jóvenes que participaron en dicho
movimiento, tampoco fueron escuchados, a pesar de toda la difusión de los
medios. Y con el gobierno entrante no va a mejorar, sino que se va a poner todo
más difícil para todos aquellos jóvenes con buenas ideas, pero sin el dinero
suficiente para poder llevar a cabo todos sus proyectos.
Yo como joven que soy y al
ver igual de fútiles la victoria de Obama y el 15-M, pienso que estamos ante
una política oxidada que sigue beneficiando al viejo rico. Y pienso también que
sería mejor emigrar a otro país en el que los jóvenes puedan llevar a cabo sus
ideas y proyectos sin que el dinero sea un “handicap”. Por lo que no creo que
mi voto ni el del resto de los jóvenes sea útil ya que como se suele decir, no
nos representan.
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