martes, 11 de abril de 2023

El mito de la caverna

 

Yo soy el tipo que está ahí arriba, me he quedado sorprendido porque todo esté en blanco ahí arriba y solo haya un prado infinito. 


Se estaba más a gusto en la caverna, estábamos entretenidos con la proyección de sombras. La demás gente que está ahí mirando no se da cuenta de que son marionetas, pero yo sí, soy más listo que ellos, por eso estoy aquí arriba. 

Cuando vuelvo y les digo lo que he visto al salir me dicen: ¿ves? eso es una mierda, quédate aquí abajo y cállate que estamos viendo el espectáculo de vivir, no molestes.

Por eso no me gusta estar en la cueva, no entiendo a la gente de ahí, igual también saben que son marionetas, pero les da igual... Es que no se por qué este vacío infinito me tiene tan absorto, si no hay nada, ni nadie. Bueno viviré en algún lugar de la cueva antigua y seguiré viendo las sombras, pero las que a mi me gustan.

(No ve nada cuando está arriba porque sus ojos no se consiguen adaptar a la luz del Sol por haber vivido en la oscuridad toda la vida.)

Pasado un tiempo conseguí ver lo que había, de hecho había hasta puta peña; como la de la cueva pero viviendo en la superficie, que gente más rara tú, pero son sus costumbres así que me callo la puta boca, que soy un privilegiado de cueva. Al principio guay, me di cuenta que había personas de todo tipo, pero había un problema, en algún momento todos volvían a sus "cuevas" y yo me quedaba solo, en mitad del campo, vale que sea un hombre salvaje pero el frío de noche con el culo al aire se pasa mal.

Hubo un follón, unos dijeron no se que cosa, otros la contraria y se mataron los unos a los otros, verlo fue horrible, había visto sombras así en el pasado, pero verlo de verdad sorprende mucho. En mitad de la pelea apareció gente con palos subidos en una especie de coche pero con patas; y los mataron a todos, se quedaron con sus "cuevas" y yo me piré, no pintaba nada en ese conflicto, total, no soy de ahí.

Cuando regresé con mis antiguos concuevanos, término que yo mismo acuñé, me dijeron que lo que había visto era normal, que esa "gente" era así siempre y que por eso ellos se quedaban en la cueva, para evitar problemas. Pero yo se que esas sombras son falsas y que yo se la verdad, aunque nadie me crea.

Desperté en la cama de un hotel, oliendo mucho a sudor sin saber lo que había ocurrido, mire el reloj y mi corazón se aceleró, llegaba tarde a una importante entrevista de trabajo. La tele no me va a engañar, el capitalismo es bueno, la familia tiene que ser tradicional, que haya niños, la economía y el turismo son muy importantes para seguir vivos aquí. ¿Por qué va tan lento este autobús hoy?

Llegué a la entrevista, me sonrieron mucho y fueron muy amables conmigo, ha pasado un mes de aquello y no me han dicho nada, ni si sí ni si no, no debería haber preguntado por cuanto me iban a pagar, eso no se pregunta que queda feo y parece que solo te interesa el dinero.

Creo que voy a encender el horno, aunque no esté para bollos.

fin.








































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